El chicle: el único 'alimento' que no se come
Se mastica por pasatiempo, porque no es nutritivo. Si se elige uno sin azúcar ayuda a controlar la higiene bucal, disfraza la sensación de hambre y enmascara el mal aliento.
Se rumia, porque no se traga, como se haría con cualquier comestible. "Cada persona tiene sus hábitos y movimientos únicos. Lo ideal sería mascarlo por los dos lados, para no
cargar uno en exceso, pero siempre tenemos uno favorito", explica
Bruno Baracco, vocal del Colegio de Odontólogos y
Estomatólogos de Madrid.
Quien mastica con la boca abierta también lo hará con el chicle.
Esta masticación por pasatiempo resulta ser provechosa si se realiza con cierto producto y a determinada hora (y sin hacer globos, por educación). "Mascar chicle sí es beneficioso,
siempre que no contenga azúcar y, en su lugar, se utilice xilitol, un edulcorante natural procedente de la madera del abedul", comenta el odontólogo. "Este ingrediente no genera ácido y por
tanto no fomenta la aparición de caries y disminuye las bacterias en la boca (sobre todo los estreptococos), que causan el inicio del deterioro del esmalte", argumenta.
Lo ideal es que la goma de mascar se consuma justo después de la comida, a modo de postre. "Así evitamos un dulce, como punto y final a un almuerzo, y comenzamos a producir
saliva. Una saliva que, de forma natural, no se generaría en cantidad suficiente hasta pasada media hora después de terminar de comer. Si nos adelantamos esos 30 minutos, nos beneficiamos de sus
propiedades: calcio y fosfatos naturales y aumentamos el PH y se reduce así la acidez", revela el especialista.
Como tiempo de mascado, el experto sugiere sacarle partido a la golosina durante media hora. Más no sería necesario. Además, el odontólogo aclara que se trata de una buena
medida de urgencia, ya que el chicle jamás sustituye a un cepillo de dientes de manera habitual, "porque no cumplen la misma función".
A FAVOR: El aseo de emergencia
- EN EL BOLSO Porque salva de un apuro:disminuye la ansiedad de picar entre horas, disfraza el mal aliento y evita la aparición de caries.
- SIN REMORDIMIENTO Si es sin azúcar no fomenta la aparición de caries y no engorda. Una gragea(de 1,4 gr y 2,2 cm) aporta sólo unas 2 kcal.
- NO SE PEGAN a los dientes... La mayoría de las marcas son aptas para personas con prótesis. Tranquilidad:tampoco se adhieren a las paredes del estómago si un niño se lo
traga.
- BONITA SONRISA y sin complejos. Como mascar chicle en público hace fijar la vista en la boca, quienes se atreven están a gusto con sus dientes.
- VICIO ALPINO A los suizos les gusta más: consumen 222 unidades al año, mientras que en España sólo 79. Esta golosina está presente en el 48% de los hogares.
EN CONTRA: Una guarrada indestructible
- SINGAPUR SE RINDIÓ Desde hace 25 años, está prohibido mascar chicle, así como su fabricación, importación y venta, porque sus habitantes lo pegaban en las puertas y paredes del
transporte público e impedían su funcionamiento.
- UN LUSTRO Hay que tener en cuenta que en la boca dura unos minutos, pero no se descompone de forma natural hasta pasados cinco años.
- GASTO DE LIMPIEZA Es siete veces más caro que su precio en tienda. El Ayuntamiento de Logroño se gastó 0,35 euros en cada chicle que arrancó de sus aceras en 2016. Se debe tirar
en el contenedor gris (orgánico).
- MEJOR NO COMPARTIR Aunque no se sea escrupuloso. En cada gragea se adhieren hasta 10.000 bacterias que pasan de una boca a otra.
- GASES Sí propicia, igual que una bebida carbonatada.